Mi nombre es Mario de la Iglesia, y soy psicólogo clínico vía PIR.
Sin embargo, desde niño mi vocación actoral siempre estuvo presente, por lo que tras más de 8 años dedicado exclusivamente al ámbito de la psicoterapia decidí profesionalizar mi otra gran pasión: la interpretación.
Durante los últimos años he trabajo en ambos ámbitos, lo que me ha hecho entender sus virtudes cuando nos sentimos en equilibrio y sus posibles dificultades cuando eso no ocurre.
Descubrir la especialidad de la Psicología de Artistas supuso un antes y un después, pudiendo integral el trabajo emocional, corporal y cognitivo, para ofrecer herramientas reales y personalizadas tanto a nivel personal como profesional, siempre desde un lugar de comprensión y respeto.